Mujeres soldadoras es el resultado de la articulación pública y privada con el objetivo de fomentar el trabajo y el desarrollo en la ciudad. Se trata de una iniciativa que surgió entre la Municipalidad de Villa María y la empresa Cormetal que busca formar a mujeres en el mundo de la metalurgia con posibilidad de sumarse a la firma radicada en la ciudad.
Esta cooperación entre el municipio y la empresa nació en mayo del 2021 cuando se firmó un convenio de trabajo mutuo para desarrollar el Programa de Alfabetización y Educación Básica de Jóvenes y Adultos en espacios de la sede de Cormetal, y brindar la posibilidad para que 90 empleados culminen sus estudios secundarios a través de la iniciativa educativa municipal, reconocida por Unesco. Así, se forjó una articulación entre el Gobierno local y la firma que este año suma un nuevo capítulo. Además, en esta ocasión se destaca la perspectiva de género ya que el ámbito en el que habitualmente se realiza la soldadura es mayoritariamente masculino.
La iniciativa puesta en marcha desde marzo, se lleva adelante en el predio rural de la Escuela Granja y está destinada a mujeres de 18 a 40 años interesadas en aprender y adquirir herramientas vinculadas a la soldadura de tipo Mig-Mag nivel 1. De este modo, se tiene por objetivo brindar los saberes necesarios para la ejecución del oficio, al mismo tiempo que, mediante la articulación del sector público y privado, algunas de las aprendices serán seleccionadas para formar parte de la planta laboral de la empresa Cormetal, radicada en la ciudad.
Cada jueves, el taller que funciona en la institución municipal es testigo de las múltiples historias, proyectos y desafíos que se gestan a lo largo de cada una de las clases, de la mano de las mujeres que encontraron allí un espacio que, hasta el momento, había sido ocupado por cupos masculinos. Así lo expresó Leysa Oro, de 33 años, quien relató que “siempre quise aprender a soldar, pero en muchos casos fui rechazada por ser mujer, así que cuando vi esta posibilidad no lo dudé un segundo y me anoté”.
“Es una oportunidad genial que además nos abre las puertas a poder trabajar en empresas, donde la presencia de las mujeres es muy importante, y por eso es fundamental visibilizar nuestras capacidades y hacer que donde antes no había espacio para las mujeres, comience a haberlo”, aseguró. También, Leysa compartió que estudió Animación Sociocultural y que actualmente tiene su propio taller de serigrafía, el cual desea equipar con herramientas y mobiliario creado por ella misma, ya que en la mayoría de los casos son utilitarios muy costosos.
Por su parte, otra de las alumnas, Marcela Córdoba, señaló que “por el momento me encuentro desempleada, y como siempre me gustó todo lo que es crear con mis propias manos, creo que este taller es una muy buena oportunidad”. A sus 35 años, considera que “lo que aprendemos en cada clase es muy atrapante, y eso me anima a la posibilidad de emprender y generar mi propio proyecto”. En este sentido, comentó que se encuentra interesada en el diseño de lámparas, rubro para el cual sería muy útil contar con este tipo de conocimientos.
Es oportuno destacar que la propuesta impulsada por el municipio se encuentra coordinada a través de la Secretaría de Educación, Cultura y Promoción de la Ciencia. En este marco, la iniciativa prevé desarrollarse a lo largo de doce clases, donde serán adquiridos saberes técnicos y prácticos de la mano de personal de la empresa Cormetal.